Compras en Bodrum
Arts & Culture
En la península de Bodrum, abundan las artes tradicionales: audaces, coloridas y simplemente fabulosas!
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Compras de recuerdos
Ciertamente, una parte disfrutable de unas vacaciones en Turquía es ir de compras en busca de recuerdos. Sirven como recordatorios de este paraíso soleado o como objetos que reflejan los buenos momentos vividos con amigos y familiares. En la península de Bodrum, la inspiración se encuentra en cada esquina encalada y en cada callejón bañado por el sol. Desde postales tradicionales hasta joyas turcas de lujo, llenan kilómetros de tiendas de recuerdos en Bodrum, Turquía y sus pueblos costeros vecinos.
Compras en Yalikavak
En
Yalikavak, se encuentran galerías de artistas en las calles traseras del pueblo, detrás del puerto, y dispersas alrededor de su fabuloso y nuevo puerto deportivo, Palmarina. Los pintores turcos acuden a Yalikavak en verano en busca de inspiración (y de la brisa fresca siempre presente) y suelen pintar paisajes y escenas icónicas de la zona que son ideales como recuerdos. Busca piezas de uno de los favoritos locales, Z. Kaba. Su trabajo es audaz y colorido y fácilmente reconocible por los entendidos.
Compras en Turgutreis
Turgutreis es más pequeño que Bodrum, con un par de calles llenas de artesanías a solo unos pasos del puerto--fáciles de encontrar. Los artículos a la venta suelen ser originales y representativos de manera única de los tesoros de la zona. Algunos son únicos y otros están cuidadosamente producidos en masa, manteniendo las intenciones del artesano.
Hablar con más de un propietario de tienda y pasear mirando muchas antes de comprar te dará rápidamente una comprensión de lo auténtico, asegurándote de que no compres un recuerdo turco hecho en China.
Compras en Bodrum
En el centro de la ciudad de Bodrum, el mejor lugar para comprar recuerdos está un poco alejado del paseo marítimo, en las estrechas calles empedradas detrás del puerto y del Castillo. Si no estás seguro de si intentar regatear los precios, pregunta por el precio con una palabra local "nekadar?" y asegúrate de mostrar una gran sonrisa.
Si hay alguna vacilación, tienes una oportunidad que debes aprovechar. En general, los propietarios de tiendas mayores son mucho más propensos a negociar que sus trabajadores mucho más jóvenes. Si tienes varios artículos, intenta sumar el total de los precios anunciados y redondear hacia abajo, haciendo la primera oferta. Deberías poder obtener fácilmente ese descuento.
No seas tímido y no temas irte y volver, aún estando muy obviamente mirando algo, porque regatear es de hecho una tradición centenaria. Sé valiente; tener solo uno o dos éxitos detrás de ti te darán alas! Otro consejo a tener en cuenta es que si lo que estás mirando no es una pieza única de arte, es probable que encuentres casi el mismo artículo en otros lugares de la península y PUEDE estar a un precio más bajo a solo unos pasos de distancia--tómate el tiempo de comparar.
Recuerdos turcos sugeridos
El mal de ojo no es solo una tradición turca sino un ícono del Medio Oriente; sin embargo, seguro que está por todas partes en los pueblos de aquí y tiene una historia tan divertida que contar--y no te olvides, también son muy fáciles de guardar en tus maletas.
Estas piezas cerámicas icónicas son un tipo de talismán antiguo utilizado para alejar la "mala suerte", originado por las innumerables invasiones que ha experimentado Turquía. (Ve "Ojos malvados turcos" para más información). Mayormente vistos en hogares, oficinas y tiendas sobre las puertas, también se regalan a los recién nacidos. Tienen un fondo azul brillante con un "ojo" en el medio y se venden como grandes bolas de cerámica redondas colgadas de una cuerda o como planos llaveros y platos. Incluso algunas piezas de joyería fina de oro o plata han adoptado el motivo y pueden ser un regalo encantador y ligero.
La pipa de hookah, también conocida como narguila, es otra tradición del Medio Oriente que se remonta a la época otomana. Un cilindro de vidrio grande se llena de agua y se colocan piedras aromatizadas en un pequeño plato metálico sobre él. El usuario luego inhala el humo de la pipa para disfrutar de un estado de ánimo relajado. Prueba fumar uno en una cafetería de narguila antes de comprar; sin embargo, también lucen geniales como pieza decorativa en el hogar.
Las campanas de camello de latón son otro artículo que probablemente encuentres y vienen en una gran variedad de tamaños y edades. Los precios van en consecuencia. Aunque hay pocos camellos que se encuentran aquí, las campanas antiguas son verdaderas piezas de colección. El mejor lugar para encontrar estos tesoros son los pazar locales de los pueblos alrededor de la península.
Más recuerdos para considerar
Las alfombras turcas son muy populares porque son una tradición antigua, originalmente utilizadas por los nómadas. Hechas a mano, durante muchos meses, los motivos y símbolos están directamente conectados con una tribu o área determinada. Esta es una ocasión en la que definitivamente se necesita regatear sobre el precio y, si es posible, llevar un guía profesional contigo para asegurarte de que no estás comprando una alfombra falsa hecha en otro país.
El Delight turco es un dulce aromatizado, hecho de azúcar y almidón que viene en una variedad de sabores. Uno de los favoritos locales es el de Agua de Rosas. Llamado lokum en turco, se vio por primera vez en 1776, era un manjar de la alta sociedad y a menudo se enviaba a Europa para que lo comieran las clases altas. En la actualidad, afortunadamente, no es tan caro y a menudo se vende bajo la modalidad de compra dos cajas y recibe una gratis.
También hay bonitos platos pequeños cubiertos con tapa y con tallo diseñados específicamente para servir este dulce especial. Tradicionalmente, se sirven un par de piezas junto con Café Turco en los hogares locales. Ve a una tienda de pueblo donde las piezas individuales se venden por peso; allí puedes degustar los diferentes sabores y luego pedir que se cree una caja de regalo, asegurando que tu regalo será un placer fresco--no uno que esté duro como una roca cuando tu familia en casa lo pruebe.
El ónix abunda en Turquía, sacado de la tierra y trabajado a mano para convertirlo en piezas de ajedrez,
joyería, y artículos decorativos. En algunos lugares, puedes ver al artista trabajando, pero ya no usan herramientas manuales, prefiriendo la maquinaria moderna. El precio puede ser caro, así que recuerda regatear.
